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wasatiya... moderación, camino medio

Mi vida al aire libre

De adolescente, cuando me lamentaba ante mis amigos de los procedimientos didácticos de mi padre, ellos decían que ésta era la educación  francesa y que la educación francesa estaba muy bien. Que ellos no sabían nadar, ni montar en bicicleta, ni distinguir un cuco de un arrendajo porque no habían recibido educación francesa y que era un atraso. Que criar un crío entre algodones era arriesgado porque luego, cada vez que la vida le pasa factura, no sabe qué actitud adoptar

 

Con esta sentencia en boca de sus amigotes, concluye Delibes el magistral relato sobre cómo su padre le enseñó a montar en bicicleta. Es una escena cargada de humor fresco, que ha hecho que me riera en alto imaginándome al pobre "Miguelito" manteniendo el tipo dando vueltas, siempre la misma vuelta, para evitar "estolozarse" al intentar bajar.  Pensaba yo que la  educación entre algodones era un fenómeno reciente  pero, por lo deja entrever el autor, es algo atemporal, siempre ha habido papás proteccionistas en extremo...

2 comentarios

Dolores -

No, yo creo que el problema, por lo que dice mi amigo Miguel, viene de lejos; ahora,puede que el sobreexceso se deba a una especie de miedo o de inseguridad ante "lo que no controlo" y, por tanto, tiendo a controlarlo todo, también a mis hijos...pero es hablar por no callar, habría que pensarlo despacio

Estelius -

¿Y por qué será que los padres son ahora tan blandos? ¿No los educaron a ellos en valores?